¿Recuerdas cuando eras niño? Esa etapa de la vida en la que reías con facilidad, no tenias preocupaciones ni sabías lo que era la gastritis (o colitis), que hacías amigos en un abrir y cerrar de ojos, cuando tenías muchos sueños e ilusiones sobre lo que serías cuando fueras adulto. Sin duda es una etapa mágica, una de las mejores de la vida.
¿Qué pasaría si por HOY vuelves a vivir esa magia de ser niño?
1.Relájate.
Deja de pensar en tus preocupaciones, respira profundo y disfruta de cada pequeño detalle que te regala la vida.
2.Haz algo que te encante.
Los niños hacen todos los días actividades que les encanta. Haz lo mismo. Busca tiempo para disfrutar, aunque sea por unos minutos, de tus pasiones, ya sea pintar, leer, correr o simplemente darte un rico baño caliente.
3.Se creativo.
Deja que tu niño interior hable durante todo el día y busca nuevas maneras creativas de resolver cualquier problema o conflicto que se te presente.
4.Demuestra tu amor.
Un abrazo, un beso, un saludo, son muestras de cariño que los niños hacen con gran facilidad y sin ninguna razón en especial. Sigue su ejemplo y demuestra tu amor a los demás.
5.No juzgues.
A los niños no les importa su aspecto físico ni el de los demás, así que sigue su ejemplo y deja los prejuicios y acepta a los demás tal cual son. Pero antes que nada, acéptate a ti tal cual eres.
6.Juega con algo de tu infancia.
Ya sea una muñeca, unas piezas de lego o meccano, con una pelota, unas matatenas o un juego de mesa. Visita una juguetería http://www.spinmaster.com/ y transpórtate a aquellos momentos en los que todo era diversión.
7.Colorea.
Toma unas crayolas, plumones o colores y ponte a dibujar o colorear. ¿No se te ocurre dibujar algo? Ponte a colorear un mandala que te ayudará a centrarte y te devuelve al aquí y ahora.
8.Ponte a hacer burbujas de jabón.
¿Te has dado cuenta que todo niño se fascina con burbujas de jabón? Pruébalo hoy y descubre por qué esta es una actividad tan divertida.
9.Juega con la comida.
La comida puede ser muy divertida si la embarras en tu cara o en la de la persona junto a ti. Si de esto se deriva una Guerra de comida, ¡aún más divertido!
10.Visita un parque.
Ya sea subirte a los columpios, a la resbaladilla, escalar, correr o simplemente acostarse y observar a la naturaleza. Recordarás aquellos tiempos en los que la diversión no terminaba.
11.Baila.
Pon tu música preferida y ¡déjate llevar sin preocuparte si bailas bien o mal! El mover tu cuerpo al ritmo de la música es una actividad liberadora.
12.Emociónate.
Celebra cada pequeño logro y momento de tu día. Disfruta todo lo que eres y lo que serás. La vida es demasiado corta para vivirla de manera aburrida.
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