La mejor forma de prevenir la influenza es vacunarse todos los años, ya que ésta contiene las cepas que te protege de los virus más importantes. Además, es importante llevar a cabo ciertos hábitos saludables para evitar el contagio.
Estas son las más importantes:
-El virus de la influenza sobrevive hasta 3 horas en las manos y 72 horas en las superficies que tocamos por lo que lavarse las manos continuamente con agua y jabón y usar gel antibacterial es imprescindible.
-Dado que los virus viajan a través de las gotitas de saliva que se expulsan al hablar toser o estornudar hasta un metro de distancia, es muy importante cubrirse la boca, de preferencia con un tapabocas cuando se está enfermo.
-Hay que habituarse a toser o estornudar en un pañuelo o en la parte interna del codo para evitar que las manos se contaminen de saliva.
-Limpiar diariamente el entorno (casa, escuela y oficina) y mantenerlo ventilado y permitir la entrada de luz. Los virus pueden destruirse con la luz del sol y los limpiadores jabonosos por lo que es importante limpiar picaportes, agarraderas, escritorios, mesas, barandales y lugares que se tocan continuamente,
-Lavar después de cada uso las prendas de vestir, sobre todo las invernales como bufandas, mascadas, guantes, suéteres, rebozos, etc. ya que el virus puede permanecer vivo hasta por 12 horas.
-No tocarse la cara con las manos sucias, sobre todo nariz, boca y ojos ya que el virus entra al organismo por medio de las mucosas de boca, nariz y ojos,
-Evita acudir a sitios muy concurridos cuando hay epidemias de influenza.
-No compartas cubiertos ni bebas del mismo vaso que otras personas.
-Al menor síntoma de influenza permanece en casa, guarda reposo y acude al medico si presentas síntomas como: fiebre, dolor de cabeza, dolor de garganta y escurrimiento nasal.
-Mantén un buen sistema inmune durmiendo las horas necesarias, bebiendo muchos líquidos, comiendo alimentos ricos en vitamina C, controlando el estrés. Si consume suplementos de vitamina C, asegúrese que contenga Zinc, pues estimula su absorción.
-Alimentos ricos en vitamina C: naranjas, toronjas, mandarinas, limones, limas, fresas, cerezas, papaya, kiwi, guayaba, pimientos, hojas verdes, brócoli, coliflor, tomates.
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