¿Comes por razones emocionales?

comes por razones emocionales

La mayoría de las personas comemos por razones emocionales de cuando en cuando. Ya sea por felicidad, angustia, tristeza o estrés, comemos más de lo que debemos o sin tener hambre. Pero cuando esto se convierte en un estilo de vida, estamos hablando de que comes por razones emocionales; es decir, comer por otras razones que nada tienen que ver con el hambre física. Esta es una de las razones por la que algunas personas fallan en sus dietas pues por más rico que sea el menú de la dieta y por más ganas que se quiera bajar esos kilitos de más, al no satisfacer la razón detrás del hambre, no se lograrán los objetivos.

 

Lo que hay detrás del hambre

Hay quienes comen cuando están tristes, otros aburridos; para algunos la comida es como su mejor amigo, la cual siempre está disponible en los momentos de soledad. Hay quienes comen cuando están cansados, otros cuando están estresados, otros cuando están felices y hasta cuando están frustrados. El problema es que cuando comemos cuando no tenemos hambre física, al terminar no sentimos saciedad y generalmente suele acompañarnos una gran culpabilidad.

Quienes comen por razones emocionales utilizan a la comida como herramienta para sentirse mejor, en lugar de para saciar el hambre física. Esas galletitas que comen frente de la tele, el pastel que comen para festejar al compañero de trabajo, o los chocolates que comen para mitigar la tristeza o depresión. La comida se utiliza como un relajante, como un premio o un motivo de celebración y se utiliza como un impulso, más que una necesidad del organismo. Y el problema radica en que el hambre emocional no se puede llenar con comida y por más que comas y comas, la sensación de bienestar será momentáneo y al fin y al cabo terminarás sintiéndote culpable y con ese mismo hoyo emocional.

comes por razones emocionales

Tu hambre es…¿Emocional o Física?

Estas son las diferencias entre el hambre emocional y la física. ¿Cuál de estas has sentido?

 

¿Cómo se siente el hambre física?

-El se siente hambre en el estómago

-Aparece de manera gradual

-Cualquier alimento satisface el hambre física, incluyendo verduras y frutas

-Paras de comer cuando el hambre ha sido satisfecha

-Al terminar de comer, te sientes satisfecho

 

¿Cómo se siente el hambre emocional?

-No se siente el hambre en el estómago, se percibe más en la cabeza

-Es fuerte y aparece de forma repentina

-El antojo se da por alimentos específicos, sobre todo altos en grasas y azúcar

-Como no se presenta la señal de saciedad, sueles comer el exceso

-Al termino de comer, surge un sentimiento de culpabilidad y sensación de haber comido en exceso

 

Quienes comen por razones emocionales lo hacen cuando:

-Surgen situaciones estresantes

-Sienten emociones fuertes como miedo, enojo, tristeza, ansiedad, soledad, nerviosismo o aburrimiento

-Comen por distracción

-Tienen malos hábitos alimenticios

-Desean llenar un vacío en su vida

-Sienten influencia social

comes por razones emocionales

Alimenta de otra manera a tus emociones

Existen maneras más productivas de cubrir tus necesidades emocionales, sin necesidad de romper tu dieta y comer en exceso. La primera de ellas es practicar comer poniendo total atención a lo que haces. Esto ayuda a tener el control sobre lo que comes y lo que sientes.

 

Otras maneras de evitar comer por razones emocionales son:

 

-Trata de manejar tus emociones de otra manera que no sea a través de la comida. Por ejemplo: si te sientes triste, habla de tus sentimientos con alguien, si te sientes aburrido, realiza alguna actividad al aire libre, si sientes ansiedad, realiza un poco de ejercicio o realiza alguna actividad creativa, etc.

 

-Aprende a descubrir cuales son las emociones que detonan que comas cuando no tienes hambre

 

-Cuando sientas el antojo, espera 5 minutos. Trata de distraerte y pensar en otra cosa hasta que puedas tomar una mejor decisión.

 

-Trata de estar más en contacto con tus emociones para que así encuentres una mejor manera para entenderlas y aceptarlas

 

-Come con mayor tranquilidad, realiza pausas, mastica con calma y disfruta de la textura, sabor y aroma de cada alimento

 

-Busca otras maneras de buscar momentos de placer y felicidad en tu día a día. Usa ropa que te haga sentir bien, toma baños de tina, hazte masajes, disfruta de tus seres queridos, apapáchate todos los días.

 

-Evita tener en casa alimentos que detonen tu compulsión por comer. Mejor llena tu refrigerador de alimentos sanos y ricos.

Autor entrada: Editora

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *