Mucho se habla acerca de la prevención de cáncer de mama, uterino y de próstata. Ya nos estamos acostumbrando a realizarnos pruebas periódicas para detectar estas enfermedades en etapas tempranas. ¡Eso está excelente! Pero ¿qué pasa con nuestro intestino? ¿Sabías que el cáncer colorrectal es la cuarta causa de muerte por cáncer en México? “Tristemente, en los últimos 10 o 15 años ha aumentado la incidencia de esta enfermedad, tanto en hombres como en mujeres”, comenta la Dra. Itzel Vela, Médico Cirujano Oncóloga. La edad más frecuente que se presenta es entre los 50 y 65 años, pero se ha encontrado que cada vez más tumores en gente joven. Las razones de su incremento son variadas pero se cree que tiene mucho que ver con que ha aumentado el sedentarismo, el sobrepeso, tabaquismo, alcoholismo, y los malos hábitos en general.
La buena noticia es que el cáncer colorrectal puede ser curable si se detecta en etapas tempranas. En general, el cáncer colorrectal se origina en un pólipo, (una especia de protuberancia). Si se retira, se elimina al 100% el riesgo de padecer cáncer. Si se deja, al paso de 3 o 5 años se puede volver cáncer. Una vez que se vuelve cáncer depende de la biología del tumor (qué tan agresivo es) para saber cómo va a pasar de etapa temprana a una avanzada.
¿Qué debemos de hacer para cuidar nuestro colon?
Primero: Lo importante es tener una alimentación sana. Comer frutas, verduras, granos, fibras, evitar embutidos, comidas procesadas, enlatadas, con mucha sal, tabaco y alcohol. Así disminuimos nuestro riesgo. Además hay que agregar al menos una hora de ejercicio, evitar el estilo de vida sedentario y el sobrepeso, pues es factor de riesgo de muchas enfermedades. El artículo de detox a tu alacena, muestra todo lo que debemos de comer y evitar. Léelo aquí: https://tudosisdiaria.com/hazle-un-detox-a-tu-alacena/
Segundo: Es fundamental que las personas mayores de 50 años o con factores de riesgo acudan a su médico y se realicen los estudios óptimos para recibir un diagnóstico oportuno. El estudio más preciso para detectar la enfermedad es la colonoscopia. Hay otros menos invasivos como una muestra de materia fecal, pero no es tan específico. La colonoscopía consiste en introducir una cámara para explorar el recto y el colon. Por este método se puede ver la presencia de lesiones, que sean o no tumores, además de tomar biopsias, las cuales darán el diagnóstico definitivo. Si el estudio sale perfecto, se vuelve a hacer el 10 años. Si se encuentra algo, se tiene que hacer al menos cada 3 años.
¡Aguas!
Los factores de riesgo para presentar la enfermedad son: llevar un estilo de vida sedentario, tener antecedentes familiares con cáncer o que hayan tenido pólipos, tener una mala alimentación, etc.
Los síntomas del cáncer colorrectal van de la mano a qué etapa de la enfermedad está pasando el paciente. Lo malo es que en etapas tempranas no dan síntomas y puede pasar asintomático. Cuando el tumor crece un poco, es cuando se tapan el colon y/o recto, y producen sangrado. Los síntomas más frecuentes son: sangrado revuelto en las evacuaciones, goteo o sangre negra. Lo malo es que a veces se confunde con hemorroides. Otro síntoma es el estreñimiento o diarrea acompañada de moco o sangre. También cuando se presenta una perdida de peso inexplicable. “Estos serían datos que nos alarmarían y debemos de buscar atención médica”, concluye la Dra. Vela.
¿Te gusto el contenido de hoy? Sígueme en Facebook, dale LIKE y deja tus comentarios en TU DOSIS DIARIA.
https://www.facebook.com/tudosisdiariablog
Agradecemos la valiosa información a la Dra. Itzel Vela, médico cirujano oncóloga por el Instituto Nacional de Cancerología (INCAN) y actualmente médico de base en el departamento de Tumores de Tubo Digestivo en el mismo Instituto. Asimismo, es Coordinadora de la Unidad de Desarrollo de Destrezas Médicas (UDDEM) del INCAN y ejerce la práctica privada en cirugía oncológica en el Hospital Ángeles de Pedregal.